Interés compuesto: la octava maravilla del mundo

ARTÍCULO

Leonardo Varas

10/12/20253 min read

Hay un concepto que puede cambiar por completo la forma en la que ves el dinero: el interés compuesto.
Albert Einstein lo llamó “la fuerza más poderosa del universo”. Y no exageraba.

El interés compuesto es lo que diferencia a quienes solo ahorran de quienes construyen riqueza con el tiempo.

a glass jar filled with coins and a plant
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¿Qué es el interés compuesto?

El interés compuesto es cuando tus ganancias empiezan a generar más ganancias.
Es decir, no solo ganas sobre el dinero que invertiste al inicio, sino también sobre los intereses que ya obtuviste.

Piénsalo así:
Si hoy inviertes S/1,000 y ganas un 10% anual, al final del año tendrás S/1,100.
El siguiente año, ese 10% ya no se calcula sobre los S/1,000 iniciales, sino sobre los S/1,100.
Y así, año tras año, tu dinero crece de manera acelerada.

Es como una bola de nieve: al principio pequeña, pero mientras más tiempo la dejas rodar, más grande se hace.

Ejemplo práctico: el poder del tiempo

Imagina que dos personas deciden invertir S/200 al mes con una rentabilidad promedio del 10% anual.

  • Ana empieza a los 25 años.

  • Luis empieza a los 35 años.

Cuando ambos cumplen 60 años:

  • Ana habrá acumulado más de S/750,000.

  • Luis, poco más de S/280,000.

La diferencia no está en cuánto invirtieron, sino en quién empezó antes. El tiempo es el ingrediente que potencia el interés compuesto.

Puedes jugar un poco con la calculadora de interés compuesto de Investor.gov

Por qué el interés compuesto es tan importante

  1. Convierte el tiempo en tu mejor aliado

    El secreto no está en cuánto inviertes, sino en cuánto tiempo dejas que el dinero trabaje por ti.
    Cuanto antes empieces, más se multiplica tu capital, incluso si tus aportes son pequeños.

  2. Funciona de forma automática

    Una vez que tus inversiones generan rendimiento, el proceso continúa sin que hagas nada.
    Por eso se dice que el interés compuesto es “dinero trabajando mientras tú duermes”.

  3. Maximiza el ahorro a largo plazo

    Ahorrar S/200 mensuales puede parecer poco, pero con el interés compuesto a lo largo de los años, el resultado es impresionante.

Dónde aprovechar el interés compuesto

Puedes beneficiarte de esta fuerza en distintas herramientas financieras, dependiendo de tu perfil:

  • ETFs e inversiones en bolsa: ideales para el largo plazo. (actualmente estoy usando el ETF VUAA replica al S&P500 y los dividendos los reinvierte en automático, lo cual tiene muchos beneficios)

  • Fondos mutuos o indexados: también permiten aprovechar la capitalización de los rendimientos.

  • Ahorro programado o depósitos a plazo: generan intereses periódicos, aunque el crecimiento suele ser menor.

Lo importante no es dónde empieces, sino empezar.

Cómo hacerlo parte de tu estrategia

  1. Empieza cuanto antes.
    El mejor momento para invertir fue ayer; el segundo mejor es hoy. El interés compuesto recompensa la paciencia, no la perfección.

  2. Sé constante.
    Invertir cada mes, aunque sea poco, multiplica el efecto compuesto. La constancia vence al monto inicial.

  3. Reinvierte tus ganancias.
    No retires tus rendimientos. Déjalos dentro para que sigan generando más intereses.

  4. Ten una meta clara.
    Saber por qué estás invirtiendo (educación, casa, retiro) te ayuda a mantenerte firme.

El error más común: buscar resultados rápidos

Mucha gente abandona porque no ve grandes ganancias al inicio. Pero el interés compuesto crece lento al principio y rápido después.
Los primeros años son para construir base; los últimos, para ver resultados exponenciales.

El problema es que la mayoría se rinde justo antes de que empiece la parte más poderosa.

eight round gold coins on white surface
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En resumen

El interés compuesto no es magia, es matemática. Pero una matemática que puede transformar tu futuro financiero si le das tiempo y constancia.

Empieza hoy, aunque sea con poco. Cada sol que inviertes es una semilla que, con los años, puede convertirse en un árbol que te dará frutos por el resto de tu vida.